“EROSIÓN Y DELIRIO”

En Monterrey, la ciudad se oxida y se fragmenta al ritmo de su propio delirio. El paisaje es un cuerpo en desgaste, tallado por la industria, la precariedad y el deseo de permanencia. Aquí, la erosión no es solo una condición de la materia, sino un proceso que atraviesa la piel, la memoria y el sentido de identidad. Erosión y Delirio es una exploración de esas fisuras, de los cuerpos que resisten, mutan y se inscriben en el tiempo con marcas imborrables. A través de pintura, escultura, dibujo e instalación, la exposición reúne artistas que exploran lo que sobrevive al desgaste, lo que se insubordina y lo que encuentra en la decadencia una nueva forma de existencia.

Las obras exhibidas oscilan entre lo figurativo y lo abstracto, entre lo íntimo y lo colectivo. Algunas presentan rostros que emergen y se deforman, cuerpos en tránsito entre la identidad y la disolución. Otras, a través de materia corroída y superficies rugosas, evocan los procesos de oxidación que encontramos en el espacio urbano: el metal vencido por la humedad, el concreto agrietado por el tiempo, la carne marcada por la fatiga. Hay una materialidad que insiste en hablar, en recordarnos que toda estructura, por más rígida que parezca, está destinada a ceder.

El delirio, en este contexto, no es solo un escape, sino una respuesta a la alienación. Es el momento en que la realidad se desmorona y la imaginación se convierte en herramienta para la supervivencia. La repetición de gestos, el uso de colores que evocan lo orgánico y lo sintético, la distorsión de las formas y la presencia de símbolos recurrentes sugieren un intento de reconfigurar la experiencia del mundo, de encontrar nuevos códigos para nombrar lo que duele, lo que libera y lo que arde en el contacto con el otro.

Desde la lucha cotidiana hasta el placer subversivo, Erosión y Delirio traza un mapa de tensiones y resistencias. No se trata solo de mirar lo que se descompone, sino de reconocer en la transformación una posibilidad de justicia, de insurrección, de redención. Como la tierra después del incendio, como la piel después de la herida, esta exposición propone una lectura del arte como un proceso continuo de desgaste y reinvención, de memoria y renacimiento.


Dirección: Andrea Perales

Curaduría: Bernardo Guijarro

Libertad Alcántara

Luis Octavio Moracanela

Michelle Chávez

Oscar Esteban

Vico Viera

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